Este martes ha tenido lugar el Comité Local de Información y Sostenibilidad (CLIS) de la fábrica de Holcim en Montcada i Reixac, un foro de diálogo de carácter anual en el que el equipo de la planta comparte el balance de la actividad, apostando por la transparencia y un modelo participativo.

En el encuentro han participado representantes de entidades vecinales, culturales y deportivas del municipio, así como del sector del cemento y diputados de diferentes partidos parlamentarios, siendo este un ejercicio de transparencia sobre la actividad de la fábrica y un espacio donde resolver las posibles dudas sobre su actividad. El director de la fábrica, Vicente Pedro, ha iniciado la presentación recordando que “un año más, la fábrica de Montcada i Reixac renueva su compromiso con la descarbonización de la industria desarrollando iniciativas y acciones enfocadas a la economía circular”.

En la exposición, se ha puesto énfasis en que la fábrica de Montcada i Reixac desarrolla la tecnología ECOCycle®, consiguiendo una cartera de productos basados en cemento que incluye, al menos, un 10% de materiales reciclados procedentes de la construcción y la demolición. Por ello, se ha insistido en la voluntad de “continuar construyendo infraestructuras y edificios de Cataluña con un material que, en su composición, incorpora materiales reciclados y que es clave para convertir en realidad el concepto de construcción circular”.

Otro de los aspectos analizados ha sido la valorización energética con biomasa, alcanzado un porcentaje de sustitución del 49%, además de la apuesta por la descarbonización de la flota, contando con el primer camión bañera 100% eléctrico que opera entre la fábrica de Montcada y la cantera de El Garraf. En este sentido, con el objetivo de continuar manteniendo el liderazgo en materia de descarbonización, se ha avanzado la hoja de ruta hacia las cero emisiones netas de la compañía, así como proyectos que mejorarán la eficiencia energética y la reducción de la huella hídrica.

El encuentro también ha servido, un año más, para informar de los principales indicadores ambientales y controles que se llevan a cabo en los diferentes vectores: calidad del aire, agua, residuos o ruidos, entre otros; o la reducción de emisiones de CO2 durante el proceso de producción. Unos controles e inspecciones que realizan las administraciones reguladoras competentes y que avalan las auditorías, tanto internas como externas.

El CLIS también ha sido una nueva oportunidad para poner en valor la restauración de la antigua cantera del Turó de Montcada. Y, en especial, por la iniciativa presentada en público del proyecto BIRS (Biodiversity Indicator and Reporting System), una metodología para determinar el nivel de riesgos y oportunidades para la biodiversidad en los espacios mineros y monitorizar su evolución año tras año. Siguiendo el modelo desarrollado conjuntamente con la UICN, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza de las Naciones Unidas, se materializa el compromiso de Holcim por monitorizar el impacto positivo sobre la biodiversidad, y que este sea medible y cuantificable. También se ha destacado el modelo participativo, a través del acuerdo de custodia, con la entidad conservacionista ACER y e l convenio con el Parque Natural de Collserola para uso público del Turó de Montcada, como ejemplos para ilustrar cómo los enfoques basados en la naturaleza proporcionan soluciones que garantizan la conservación y buena salud de los ecosistemas naturales a largo plazo, al tiempo que benefician al entorno y la sociedad.