Scheuch

La planta cementera de Kirchdorfer Zementwerk se denomina a sí misma ‘una de las más limpias del mundo’. La instalación, ubicada en la Alta Austria, es la primera fábrica de cemento en todo el mundo que cuenta con la tecnología DeCONOx.

“En los últimos 15 años hemos invertido más de 23 millones de euros en la protección del medio ambiente”, se enorgullece en afi rmar el gerente de planta, Anton Secklehner. “El calor residual del proceso se almacena en la red distrital de calefacción y suplimos así la demanda de más de 1.000 familias y establecimientos de Kirchdorf, ofreciendo un calor respetuoso con el medio ambiente. Con la primera instalación a nivel mundial del DeCONOx hemos hecho realidad un nuevo hito junto con nuestro socio Scheuch”.

Originalmente, la planta Kirchdorfer había planeado solamente la instalación de un catalizador de gases efluentes. La operación estaba de hecho ya aprobada. Pero la idea de los técnicos de Scheuch, de aprovechar la energía contenida en el monóxido de carbono (CO) para la desnitrificación, gustó tanto, que la dirección de la compañía detuvo el plan previo y quiso comprobar tal funcionalidad con una instalación piloto. (…)