Edificación sostenible en el mundo, ¡nos vemos en Barcelona!

Felipe Pich-Aguilera Baurier
Presidente de GBCe

Este próximo mes de octubre tendrá lugar en Barcelona el congreso WSB14, que representa la séptima edición del que es hoy en día el evento científico más significativo a nivel internacional, para el estudio de la dimensión ambiental de nuestro entorno edificado (ciudades, edificios, materiales y sistemas vinculados). Este evento atraerá a nuestra ciudad a los mejores expertos de todo el mundo, así como a algunas de las instituciones y empresas posicionadas en ese ámbito. Será la ocasión de escuchar y aprender, pero también un momento único para explicar lo que desde aquí se está haciendo y lo que en el futuro se quiere hacer.

Sabemos que la construcción de edificios y nuestro modo de habitarlos, es actualmente una cuestión ambiental a la que se le está prestando mucha atención debido al uso intensivo consumo de materia prima y energía (entorno al 40%). Actualmente el mundo se está urbanizando a gran velocidad, con sistemas y modelos basados en referentes occidentales que desde el punto de vista ambiental son muy poco eficientes para el contexto en donde se ubican. Aun así el esfuerzo edificador global, concentrado en ciudades cada vez mayores, va tendiendo de manera muy imperfecta a lo que hemos definido como la ‘Sostenibilidad’, es decir transformar las bases de su producción para poder seguir produciéndose. Las megaciudades asiáticas necesitan rebajar drásticamente su consumo energético, porque la polución derivada de la combustión de carbón de sus plantas térmicas las hará literalmente inhabitables en pocos años.

La gran mayoría de viviendas del Mediterráneo Sur, no tienen otro modo de obtener agua caliente más que instalando paneles solares térmicos y es por ello que lo hacen. Así podríamos ir enumerando ejemplos de cómo la ‘sensibilidad ambiental’ occidental, se está transformando en ‘necesidad ambiental’ para el resto del mundo. Quizás hasta ahora desde Europa, la motivación para construir ecológicamente haya tenido un vector más bien emotivo o solidario, al percibir de forma difusa los inconvenientes de no hacerlo, pero eso no es así en tantos otros lugares del planeta donde padecen directa e intensamente los desarreglos de su indiscriminada acción constructora. (…)