La Responsabilidad Social Empresarial y la importancia de elegir buenos compañeros de viaje

Asier Ochoa de Eribe Iturrieta
Director de Desarrollo Sostenible en FYM-Italcementi Group

Hablar de RSE en FYM-Italcementi Group, con más de 150 años de historia -y como ya hemos puesto de manifiesto, incluso en esta misma tribuna-, es hablar de colonias industriales, becas de estudios, museos del cemento, equipos de fútbol, regatas, orfeones, etc. Podemos decir que el sector, y concretamente nuestra empresa, ya hacía RSE mucho antes de que se acuñara el término.

Entre otras muchas actividades en el ámbito de la RSE, FYM-Italcementi Group contribuye a dinamizar la vida social, vecinal y cultural de los entornos donde se ubican nuestras plantas, a través del apoyo de iniciativas que pivotan en torno a los ejes de la cultura, la educación, el deporte y el respeto al medio ambiente.

Una de las principales diferencias con la que nos encontramos respecto a la situación de hace, por ejemplo, 50 años es que lo que antes era voluntario (desde el punto de vista de la empresa), ahora se ha convertido en una obligación. Como he podido leer en un titular estos días ‘La RSE es hoy una obligación exigida por los stakeholders’. Y la otra diferencia es que, una vez que todas las empresas de cierto tamaño hacen lo mismo, es necesario estructurar y analizar lo que estás haciendo para optimizar los recursos y su retorno. En este recorrido hay que vencer inercias, agravios comparativos y numerosas situaciones del tipo de… ‘Lo hacemos así porque llevamos toda la vida haciéndolo’, ‘¿cómo vamos a dejar de colaborar con XX?’, etc. (…)